Vamos a intentar comparar dos mercados, la dearte y bienes raíces, partiendo de análisis de mercado realizados por empresas de investigación, como Nomisma o Deloitte, para llegar a las tendencias de las nuevas generaciones en caso de elegir una inversión más adecuada a su futuro. ¿Arte o ladrillo?
Mercado del arte: ¿qué está pasando?
Arte por diferentes motivos incluido el impuesto aplicado, se está convirtiendo en un activo cada vez más considerado a efectos de inversión, también por la fuerte volatilidad a la que está sujeto, pero no olvidemos que los estilos de vida a los que se acercan las nuevas generaciones han cambiado. Coleccionar arte ya no parece ser un bien para disfrutar a lo largo del tiempo, tanto por el alto riesgo que supone invertirlo –si es que uno puede permitirse comprarlo– como porque no aparece entre las principales opciones de los jóvenes. Una vez superado este último ciclo generacional, el que aún colecciona arte, tendremos que entender si es necesario repensar por completo un nuevo modelo de mercado y cómo hacerlo.
Mercado del Arte: ¿Qué modelo?
El futuro del arte hoy es un juego complejo de optimismo y mucha ansiedad. Si bien la sostenibilidad, la innovación digital y la inclusión están impulsando un cambio positivo, la incertidumbre económica y la intensa competencia plantean desafíos reales. La resiliencia del mercado del arte dependerá de su capacidad para adaptarse a estas fuerzas cambiantes, preservando al mismo tiempo el papel fundamental del arte como espejo y crítica de la sociedad.
Por lo tanto, el mundo del arte tendrá que transformarse, impulsado por los avances tecnológicos, los cambios sociopolíticos y las dinámicas económicas cambiantes. A medida que las instituciones de arte, los artistas y los coleccionistas navegan por este panorama cambiante, hay varias tendencias, desafíos y oportunidades clave que definen el futuro del arte. Desde la creciente influencia de la inteligencia artificial hasta la sostenibilidad y la volatilidad del mercado, esto es lo que depara el futuro a la industria de las artes.
Mercado inmobiliario: razones del crecimiento
En medio de la incertidumbre social y económica, el mercado inmobiliario vuelve a la competencia como refugio seguro, según leemos en el 1er Observatorio del Mercado Inmobiliario Nomisma presentado recientemente, en el que se analiza la situación del sector a nivel nacional. Se trata de una recuperación lenta pero que deja entrever señales de optimismo, provenientes de una demanda que sigue sostenida, tanto en compra como en alquiler, para un total de 719.578 transacciones.
Al mismo tiempo, la tasa de cambio de tendencia en las ventas respaldadas por hipotecas ha aumentado progresivamente hasta alcanzar el +19,5% en el último trimestre del año. Según operadores del sector, los factores que contribuyen a confirmar los niveles de actividad se deben principalmente a las condiciones de acceso al crédito, que no cambiarán sustancialmente respecto al año pasado, así como a las necesidades y disponibilidad financiera de las familias.
De cara al futuro, se espera una consolidación del crecimiento de las ventas residenciales, se espera que se estabilice en niveles promedio de dinamismo del mercado. De manera diferente pero con los mismos principios de elección al preferir la compra de propiedades residenciales en lugar de otros activos con una alta tasa de volatilidad es o será la opción para las nuevas generaciones en todo el mundo occidental, que ya sufren precariedad laboral y por tanto sin garantía de poder construir un futuro mejor.
Mercado del arte: ¿Qué riesgos corre si se polariza?
A estas alturas no es difícil comprender que la importante incertidumbre económica que estamos viviendo conducirá con el tiempo a tomar decisiones más razonadas y menos arriesgadas.. El arte tendrá que generar nuevos segmentos de interés de los clientes, pero en un mercado menos polarizado, donde los artistas exitosos continúan prosperando, mientras los talentos más jóvenes luchan por ganar visibilidad. Pero al intentar ser objetivos, al mismo tiempo también debemos intentar ser un poco más optimistas porque el futuro del arte puede albergar posibilidades ilimitadas. Con los avances en inteligencia artificial, bioarte y nanotecnología, podemos esperar ver surgir formas de expresión artística aún más innovadoras y experimentales. Las fronteras entre el arte, la ciencia y la tecnología seguirán difuminándose, lo que en última instancia dará lugar a colaboraciones interdisciplinarias y descubrimientos innovadores.
Mercado del Arte y Bienes Raíces: ¿Qué Sinergia?
Un ejemplo viene de Estados Unidos, donde ya existe una intersección entre el arte y los bienes raíces. No se trata simplemente de colgar cuadros en las paredes, sino de una verdadera incorporación estratégica del arte para realzar el valor inmobiliario, crear conexiones significativas y transformar espacios en entornos únicos y culturalmente enriquecidos. Es por esto que una sinergia de intercambio entre arte y bienes raíces podría considerarse mutuamente beneficiosa.
Por un lado, exhibir arte dentro de una propiedad podría llevar a apreciar los valores inmobiliarios, ya que atrae a una clientela que aprecia los aspectos estéticos y funcionales del espacio habitable, de modo que los compradores pueden ver su casa no solo como una residencia sino como un reflejo de su gusto personal e inclinaciones culturales. Al mismo tiempo, los desarrollos inmobiliarios brindan una plataforma importante para que los artistas lleguen a un público más amplio, a menudo más allá de los asistentes tradicionales a las galerías. Pero en nuestro país quizás estemos aún lejos de aceptar tal propuesta, son mercados todavía demasiado distintos y lejos de una posible colaboración aunque de todas formas habría que hacer una reflexión.